¿Qué legado quieres dejar?
He hecho mella significativa en mi familia durante largos años de conflicto urbano, dejando para mí un sufrido disfrute cada noche, que me pasaba torturado por mi propia cabeza y gritando mientras, retorciéndome las tripas. Hubo una noche que no se me olvidará con facilidad, porque no supe atajar el constante aumento de insultos camuflados en eso que la juventud abusa del llamado sarcasmo entre dos amigos de los tildados del alma con alevosía, dadas las lindezas que se lanzaban en el campo de batalla. No suelo permitir violencia a mi alrededor, ya he participado en demasiada y no quiero más. Ni para mí, ni para nadie. La vida bajo ese manto de miseria y cataclismos, que el dolor de la violencia causa, es opaca a la luz y los colores para compartir sin la necesidad de mantener en la base engaños y falsedad para prosperar. Aquí hay sitio para ser felices todos, sin la necesidad de pelear por pequeñas porciones de vida y tierra, con los que mercaderes y fariseos siguen especulando a lo largo de los años. Para todos todo y el fin de los días será la eternidad pensó el….otra vez, digo, agotado de verle la cara oculta del mundo.
Encuentro en el X imaginariVm 